sábado, 23 de abril de 2016

Homenaje a Cervantes en su IV centenario de su muerte

Cervantes, la pluma de referencia en la historia de la literatura

Hoy, aparte de ser la Diada de Sant Jordi (San Jorge) en Catalunya, también es la celebración de la muerte del escritor famoso y trascendental en la historia de la literatura, Cervantes. Este referente de origen español escribió grandes obras que, estoy segura, perdurarán para siempre. Este post pretende hacer un pequeño homenaje al IV  centenario de la muerte del creador de El Quijote



En primer lugar, haciendo referencia al madrileño, no solo fue soldado del ejército español, que luchó en la batalla de Lepanto y dónde quedó manco de una mano, sino que su reconocimiento viene dado por ser novelista, poeta y dramaturgo. Como todos sabemos, El Quijote es la magnum opus de Cervantes que trata de las aventuras del hidalgo Don Quijote de la Mancha y, su fiel acompañante, Sancho Panza. Cabe decir, que el capítulo con más renombre de esta gran obra es el de la lucha contra los molinos de viento comparándolos con gigantes. 


"En esto, descubrieron treinta o cuarenta molinos de viento que hay en aquel campo; y, así como don Quijote los vio, dijo a su escudero:

–La ventura va guiando nuestras cosas mejor de lo que acertáramos a desear, porque ves allí, amigo Sancho Panza, donde se descubren treinta, o pocos más, desaforados gigantes, con quien pienso hacer batalla y quitarles a todos las vidas, con cuyos despojos comenzaremos a enriquecer; que ésta es buena guerra, y es gran servicio de Dios quitar tan mala simiente de sobre la faz de la tierra.

–¿Qué gigantes? –dijo Sancho Panza.

–Aquellos que allí ves –respondió su amo– de los brazos largos, que los suelen tener algunos de casi dos leguas.

–Mire vuestra merced –respondió Sancho– que aquellos que allí se parecen no son gigantes, sino molinos de viento, y lo que en ellos parecen brazos son las aspas, que, volteadas del viento, hacen andar la piedra del molino.
–Bien parece –respondió don Quijote– que no estás cursado en esto de las aventuras: ellos son gigantes; y si tienes miedo, quítate de ahí, y ponte en oración en el espacio que yo voy a entrar con ellos en fiera y desigual batalla.
Y, diciendo esto, dio de espuelas a su caballo Rocinante, sin atender a las voces que su escudero Sancho le daba, advirtiéndole que, sin duda alguna, eran molinos de viento, y no gigantes, aquellos que iba a acometer. Pero él iba tan puesto en que eran gigantes, que ni oía las voces de su escudero Sancho ni echaba de ver, aunque estaba ya bien cerca, lo que eran; antes, iba diciendo en voces altas:
–Non fuyades, cobardes y viles criaturas, que un solo caballero es el que os acomete."

Además no solo hizo esta gran novela, sino que también fue un gran dramaturgo. Sin embargo, fue poco reconocido en su época, ya que el ilustre Lope de Vega fue el que se llevó todo el reconocimiento en el teatro durante la Edad de Oro. Don Miguel escribió El cerco de Numancia. Esta obra basada está basada en la tragedia de las Alpujarras. El tema principal es la guerra entre romanos y numantinos. Cipión es el capitán del ejército romano que creará un cerco en la ciudad de Numancia. A partir de sus personajes alegóricos (cómo el Duero, España, Guerra, Hambre, Enfermedad y Fama) aludirá a Felipe II y a la propia España para elaborar una crítica cervantina. El espacio será dentro y fuera de Numancia que se verá la diferente perspectiva de los dos ejércitos. Por otro lado y por último, quiero hacer referencia a los entremeses cervantinos. Estos son pequeñas obras que se representaban entre los actos de los corrales de comedias. Su principal función era distraer el público aunque también llevaba una gran crítica detrás y un ejemplo de ello es el Retablo de las maravillas.


Cabe recordar que también es el aniversario de la muerte de Shakespeare que murió el mismo día y año que el escritor español ¿toda una casualidad, verdad?. El dramaturgo inglés es conocido por sus obras Romeo y Julieta (1597) y Hamlet (1603). Del mismo modo, mañana se celebrará el cuarto centenario de la muerte del Inca Garcilaso de la Vega. Peruano que fue reconocido por sus obras, más importantes, La florida del Inca (1605) e Historia General del Perú (1617 publicación póstuma).


Y para acabar, ahora sí, Cervantes influenció a escritores españoles que no solo son de su época, sino más contemporáneos. Por ejemplo, los autores de la corriente del realismo, en La desheredada de Benito Pérez Galdós, asimismo autores que usaron la técnica del manuscrito hallado; Azorín en La voluntad y el propio Cela en La colmena. Tengo que decir que recomiendo fervientemente la lectura de cualquier obra de este gran maestro. No solo se aprende, sino que se crece culturalmente y se entra en un modo de escritura diferente. Porque una vez Cervantes te toma de la mano, no te deja ir jamás


Lorena, el arte de la cultura crítica

sábado, 9 de abril de 2016

"El sí de la niñas" de Moratín

Leandro Fernández de Moratín fue un reformista vinculado con la ilustración española. Su punto de vista crítico se vio reflejado en sus escritos. No solo escribió la obra que se comentará a continuación, sino obras tan ilustres como La derrota de los pedantes (1789), La comedia nueva o el café (1792), El viejo y la niña (1790), El barón (1803) y La mojigata (1804). A parte de escribir teatro, también escribió poesía.

La trama de El sí de las niñas (1805) es amorosa (bajo mi punto de vista, podría representarse en un culebrón de televisión), dramática  y sobretodo, por la pedagogía que representa. También me ha interesado por los diversos temas que se trabajan, entre ellos: el matrimonio desigual, los límites de las autoridades de los padres y la educación de los jóvenes. Dividida en tres partes y trama localizada en Alcalá de Henares, muestra unos espacios de temporalidad elíptica.

Moratín hace una crítica sobre los matrimonios desiguales que se llevaban a cabo en el s. XIX. Por una parte, ejemplifica este tema en el compromiso de Don Diego de 59 años con Doña Francisca de 16 años, una adolescente. Doña Irene hace referencia a este tema al decirle a su hija Mira que un casamiento como el que vas a hacer, muy pocas le consiguen. Es evidente que Moratín se ha tomado muchas molestias para criticar este tipo de matrimonios. Asimismo, también lo tratará en otra obra titulada El viejo y la niña. Con un pensamiento ilustrado nos viene a decir que la gente se tendría que casar por su propia decisión. Desgraciadamente, en esa época muchos matrimonios de conveniencia eran para aumentar el capital económico, de tierras, o bien, para subir el estatus social. Otro de los temas que aparece en esta obra es el límite de la autoridad de los padres. Este tema es representado por el verdadero mandato que tiene Doña Irene hacia su hija doña Francisca. Las decisiones en todos los aspectos sobre la vida de Doña Francisca los toma su madre.

Creo que Don Diego es el mejor personaje de la obra para resumir los tres temas en un fragmento (Don Diego, hace referencia a una voz totalmente ilustrada). En el que añado algunos matices.  

Él y su hija de usted estaban locos de amor, mientras que usted y las tías fundaban castillos en el aire y me llenaban la cabeza de ilusiones, que han desaparecido como un sueño... Esto resulta del abuso de autoridad [Se refiere a los límites de los padres en las decisiones de sus hijos], de la opresión que la juventud padece, éstas son las seguridades que dan los padres y los tutores, y esto lo que se debe fiar en el [A  parte de referirse al “sí” de la novia al casarse, por lo tanto el grado de sinceridad inculcado en la educación] de las niñas... Por una casualidad he sabido a tiempo el error [Referido al error que supondría el matrimonio de conveniencia y desigual entre él y Paquita] en que se presentaba... ¡Ay de aquellos que lo saben tarde!

Analizando el personaje de Doña Irene, ya que para mí es uno de los personajes más interesantes de la obra, nos viene a representar una mujer muy particular. Es viuda de tres maridos que dieron fruto a 21 hijos (dato ciertamente relevante, ya que se muestra que en esa época se acostumbraba a tener muchos hijos por la alta mortalidad infantil) de los cuales solo le queda su hija, Francisca. Por una parte, se muestra  como una madre excesivamente protectora que toma decisiones por su hija. Por otro lado, este personaje representa con claridad el pensamiento de la época que se tenía de la “finalidad” de las mujeres. Se creía que un buen matrimonio era la única esperanza que tenían las jóvenes para tener una buena vida. Para ello, se preparaban para Bordar, coser, leer libros devotos, oír misa. Se observa la importancia de la religión, el cristianismo, tanto en la vida cotidiana como en la educación.

Siguiendo con doña Irene quiero hacer referencia a la siguiente frase: ¿Y cuánto procuro tu bien, que no tengo otro pío sino el de verte colocada antes que yo falte? (en el acto II, escena V). En este pequeño fragmento no pude evitar acordarme de la Señora Bennet, personaje de la novela de Orgullo y prejuicio de la británica Jane Austen (de la que soy una fiel seguidora). Estos dos personajes muestran la angustia y el afán de una madre al querer ver a sus hijas contraer matrimonio con señores de buena familia. Les importa el honor y las mejoras (principalmente económicas) que puedan tener después de ese matrimonio. Para mí este personaje me resulta afable porque sigue las directrices que ha aprendido. No ve más allá de sus creencias sobre ese “buen” matrimonio.

En conclusión, decir que he disfrutado mucho leyendo esta obra de teatro. Por un lado, me ha hecho recordar (como he dicho antes) cuando leí la fantástica novela de Orgullo y prejuicio de Jane Austen (el paralelismo entre Doña Irene y la Sra. Bennet). Por otra parte, creo que el trabajo de Moratín es relevante e innovador en el siglo s.XVIII (XIX). El autor fue capaz de criticar un aspecto que estaba muy arraigado en la sociedad de la época, cosa que admiro. No solo por no importarle lo que dirían las críticas, sino por tener la voluntad de escribir el tema que quisiera.

Este obra es una comedia teatral que, bajo mi punto de vista, es muy recomendable, no solo por la trama del triángulo amoroso, sino por lo que significó en el s. XVIII (XIX) y actualmente. Aunque Moratín aluda a unos temas que pueden parecer en un primer momento anticuados para la sociedad actual, está más presente de lo que pensamos.

Más información:
En el siguiente enlace se puede ver la representación de teatro de la obra comentada:




Lorena, el arte de la cultura crítica